Durante mucho tiempo y en muchas culturas se ha dicho que si llueve el día de tu boda es de buen augurio, le traerá abundancia y dicha al matrimonio. Y además de la superstición, si por algún motivo estás dudando si casarte o no en tiempo de lluvias porque piensas que será un problema… sigue leyendo.
Créeme que no es necesario que elijas un recinto que esté totalmente encerrado para poder disfrutar de un excelente evento en tiempos de lluvias. Hay muchas opciones y si siempre has soñado con casarte en un jardín, la idea no es tan descabellada hoy en día.
Lo primero que te tienes que fijar es en las precauciones que se tendrían que tomar en caso de que efectivamente llueva, por ejemplo, si hay un largo trayecto entre estacionamiento y entrada o si sencillamente es un lugar que no está techado, porque habrá que cotizar paraguas e incluso carpas para que todo quede protegido.
Si el lugar es semi-abierto asegúrate de que tenga la protección necesaria para que no haya ningún inconveniente con el agua y las corrientes. Es importante que te fijes si el lugar está en pendiente porque esto generaría ríos y podría arruinar por completo la recepción y los vestidos de todas tus invitadas.
Si ya de plano no quieres correr riesgos, hay lugares cerrados que son hermosos y no tendrás que preocuparte más que de detalles mínimos para la logística, la decoración y todo lo que contrataste estará resguardado y solo te encargarás de disfrutar de ese maravilloso día y del magnífico clima que te permitirá divertirte como nunca.
¡Te deseamos amor en el proceso!