Todos sabemos que organizar una boda no es precisamente algo que se pueda hacer de la noche a la mañana y que de hecho requiere de mucho tiempo, paciencia y planeación. Sin embargo, hay muchas lecciones valiosas que se pueden aprender gracias a esta experiencia como las que te mostraremos a continuación.
Aprovechen al máximo su tiempo y presupuesto
Una de las cosas que tendrán que aprender durante la organización de su boda es cómo aprovechar sus recursos al máximo. Quizá no tengan mucho tiempo o tal vez el presupuesto no es tanto como quisieran, sin embargo pueden aprovechar lo que tienen para obtener algo mejor de lo que esperaban y esto se logra en gran parte con la siguiente lección.
Dejen algunos detalles en manos de personas de confianza
Tomar toda la responsabilidad de organizar la boda cuando se tienen otras ocupaciones importantes puede llegar a ser demasiada carga para dos personas. Así que para evitar presiones y estrés es importante aprender a delegar tareas a otras personas de confianza. Éstas pueden ser familiares o amigos cercanos, otra buena idea es contratar a un servicio de wedding planner para que les ayude a encontrar las mejores opciones y los ponga en contacto con los proveedores.
Elijan sabiamente al número de invitados
Elegir a los invitados y mandar las invitaciones puede ser un proceso muy estresante durante la planeación de la boda. Por este motivo, lo más recomendable es evitar invitar a la gente por compromiso y sólo invitar a aquellos con los que quieran compartir ese momento. Procuren mandar las invitaciones con mucho tiempo de anticipación para que los invitados alcancen a confirmarles con tiempo. También se ahorrarán mucho estrés si en la invitación indican claramente lo que esperan de los asistentes (tipo de ropa, si se admiten o no niños, si pueden llevar a otras personas, etc.).
Comparen diferentes opciones
Durante la organización de la boda se puede caer en la trampa de irse por la opción más barata o la que en apariencia se ve más atractiva. Tomar una decisión precipitada puede resultar en que al final no reciben lo que esperaban y les termina ocasionando problemas. Lo mejor es comparar entre diversas opciones y ver los comentarios y recomendaciones de otras personas que ya hayan hecho su boda.
No vale la pena sucumbir a la presión
Los días antes de la boda pueden resultar ser muy estresantes, sobre todo si hay asuntos que no se resolvieron con anterioridad, un exceso de estrés desencadena en peleas, crisis nerviosas y otras situaciones desagradables. En gran parte esto puede evitarse haciendo todo con tiempo, pero si los problemas se deben a cosas que están fuera de su control, lo mejor es tratar de tranquilizarse, tomarse un tiempo para despejar la mente y tomar en cuenta las dos siguientes lecciones.
No se obsesionen por tener todo perfecto
Incluso en la boda mejor planeada pueden surgir imprevistos que están fuera de nuestro control. Por eso lo mejor es no obsesionarse por que todo quede exactamente como lo tenían proyectado y procuren tener en mente el verdadero sentido de una boda.
Lo más importante es disfrutar
Su boda no debe ser una tortura para ustedes ni un motivo de conflicto. Lo que importa es su decisión de estar juntos y sus ganas de compartir uno de los mejores momentos de sus vidas con sus seres queridos. Disfruten de su boda pase lo que pase.
Con estas valiosas lecciones, la organización de su boda será una gran experiencia.